El ácido salicílico es un beta-hidroxiácido cuya acción principal es la exfoliante. Tiene grandes beneficios para la piel grasa y sobre todo para las pieles con acné. También trata las manchas y a diferencia de otros ácido, este penetra más profundamente, limpiando y desobstruyendo los poros. El ácido salicílico suele utilizarse para eliminar y prevenir los puntos negros y las espinillas blancas, pero también para oxigenar la piel, eliminar la hiperpigmentación y desprender las células muertas.
Se recomienda utilizar los productos con ácido salicílico de noche para evitar el contacto directo con el sol y utilizar una protección solar durante el día mientras dure el tratamiento.
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